sábado, 5 de marzo de 2011

Star Trek XI

El verdadero significado de capturar la esencia y
transformarla en algo nuevo




Desde un principio la problemática era cómo renovar una franquicia que ya estaba arraigada en los fans, transformarla y partir nuevamente desde “cero”, intentos fallidos habían por montones, y la idea era no formar parte de ellos para así evitar que la tripulación original NO pusiera esta cara.



Se le encargó a J.J. Abrams que resolviera el puzzle e hiciera esta nueva entrega de la saga Trek.

Primero necesitaba una historia con la cual poder trabajar y es con una simple idea que se resuelve gran parte de su problema, ya que echando mano a uno de los inciertos más grandes de la astronomía le da un giro insospechado a todo lo conocido y deja una puerta abierta para crear cosas nuevas en el futuro, dentro de un universo ya conocido; La idea estaba, pero tenía que desarrollarla muy bien para que los millones de fans quedaran conformes, por lo tanto no podía descuidar ningún detalle, nada podía quedar al azar, entonces se rodeó del mejor equipo y se pusieron a trabajar.

Desde el casting, hasta el vestuario, pasando por el diseño de producción, todo debía recordar a la serie de antaño, es por esto que cada imagen que uno ve en la pantalla, es reconocible claramente y no produce ese inconsciente rechazo a lo Reloaded, Begin, Return o lo 2.0.

El casting fue escogido con pinzas, especialmente los actores que interpretarían a Kirk y Spock que son los sujetos que mueven al universo de Star Trek, todo gira en torno a ellos y en su relación de amistad y de hermandad, cosa que en esta entrega parte con un giro de 180º, JJA se echa esa amistad al bolsillo y nos muestra con descaro pero con respeto todo lo contrario.

Estos dos personajes no se soportan, es más, se nos muestra un odio desmedido de Spock hacia Kirk que culmina con una gran pelea en el puente del Enterprice llegando incluso a peligrar la vida de Jim.



La veracidad de las interpretaciones, combinado con el parecido físico de los actores con los personajes originales, nos envuelven en una mágica atmósfera que se asemeja grandemente a lo ya conocido. Pero todo tiene su lado B; se evidencian detalles que son totalmente opuestos con los primeros tripulantes del Enterprice.



James Tiberius Kirk: La similitud física de Chris Paine con William Shatner (joven) es increíble, se nota el gran trabajo de este insipiente actor al estudiar los gestos, actitudes, poses y movimientos del Kirk de antaño, pero con la gran diferencia que denota su carácter actual: despreocupado, rudo, buscapleitos, autodestructivo e insubordinado,…


…características que lo acompañaron desde niño. Recuerden la escena del auto rojo.

Spock: Bipolar por su condición de mestizo y rechazado por sus pares en la infancia, nos muestra a un vulcano que sucumbe ante sus emociones,…


…algo que antiguamente no se habría aceptado, hoy es un plug interesante para el desarrollo de la historia. El Trabajo de Zachary Quinto es impecable, además que su parecido con Leonard Nimoy…


…(antiguo Spock que también aparece en este film) es notable.


Nero: Interpretado magistralmente por Eric Bana, es un dolido minero romulano que pierde a su familia y a su planeta en una catástrofe estelar y culpa a la federación de planetas por no haberlos ayudado, por lo que emprende una venganza implacable que tendrá en jaque al universo.


Podría reseñar al resto de los personajes pero sería muy extenso de leer, sólo decir que todos son muy parecidos a los actores originales y que cada uno cumple una función importante dentro de la película, todos tienen su momento de gloria en esta historia y eso demuestra lo bien cuidado del guión, especialmente al principio del film en que se muestra al capitán de la Kelvin, que aunque aparece unos minutos, es como si lo conociéramos desde siempre, su interpretación es muy buena, tenía que serlo para que toda la escena se sustentara.


El padre de Kirk que es el primer oficial de la Kelvin también brilla con ese acto heroico que salva la vida de muchas personas, incluyendo a su esposa y su recién nacido hijo. Es tan parecido al actor que interpreta a Kirk, que uno termina tragándose que de verdad es su padre.

Lo que encontré un poco extraño, pero NO malo, fue que Jim Kirk naciera en medio del ataque de Nero a la Kelvin, para mí fue un poco rebuscado, en fin, esto a la larga influiría en el cambio de personalidad (me refiero a JTK) que desarrollaría en el transcurso de su vida.

Todo lo que sucede, cada detalle, todo está allí con un propósito, todo influye en algo posteriormente, lo que hace de esta película algo muy especial, es muy psicológica, llena de dobles lecturas, no es para verla a la ligera.

En resumen, quedé impactado con esta nueva versión de Star Trek, con su solución que aparentemente es simple pero que en realidad es muy compleja, del desempeño de los actores que dan la impresión de haber hecho algún pacto budú para apoderarse del espíritu de los personajes originales, de la forma en que tomaron los elementos antiguos como los phaser, uniformes, lanzaderas e incluso el mismo Enterprise, les dieron un nuevo look sin transformarlos radicalmente, sino más bien, les dieron el aspecto de reales, dejaron de ser juguetes o maquetas.


La musicalización es fenomenal, épica, inspiradora, tierna, sublime, pasó a ser una de mis soundtrack favoritos, lo escucho siempre que voy conduciendo mi vehículo.

Yo que no soy Trekkie me hice fan al instante, imagínense como quedaron los reales fans, orgullosos, con la frente en alto, felices porque no le destrozaron la razón de su existir, al contrario, se la desempolvaron, lustraron y renovaron acorde con los tiempos actuales y le dieron alas para muchas secuelas más. Cosa que no puedo decir de Star Wars, ya que se perdió en la galaxia muy, muy lejana, pero bueno, eso será para otro comentario.

Por ahora, puedo decir para terminar que nuestros héroes originales están así de felices…


…y yo también, porque tengo una nueva saga que seguir.


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